Los pequeños detalles





Generalmente no somos conscientes de que lo realmente importante no son las cosas extraordinarias sino las personas que nos rodean y las cosas cotidianas. Un abrazo, una carcajada, un saludo, una llamada, una mirada, una flor, un café, una caricia, un desayuno, una sonrisa, una sorpresa ... son tantas cosas que se me ocurren y somos tantos en este mundo... que es imposible escribir aquí esas pequeñas cosas que a cada uno de nosotros nos llenan el alma; pero lo que si tengo claro es que esas pequeñas cosas que nos llenan no necesitan de fechas importantes ni postureos y alimentan tanto nuestras almas que forman parte de esa gran lista de motivos en la vida por los que seguir adelante.



Porque son los pequeños detalles los que tienen un mayor impacto, los que reflejan la grandeza de las personas, de nuestra capacidad de amar de manera constante y sin condiciones. Son esos detalles los que nos sacan enormes sonrisas en el momento más inesperado, los que marcan la diferencia. Y es que son esas cosas las más importantes, las que alegran tu día y lo que nos hace crecer y ser mejores cada día. 

Dicen que los pequeños detalles son el lenguaje del corazón y es que esos pequeños detalles cotidianos son los que conforman grandes universos emocionales. Esos que consolidan los valores de cada uno de nosotros, los mismos que, gesto a gesto, se ganan nuestros corazones. Y es ahí donde se revela la grandeza de una persona. Ni su aspecto, ni sus palabras, ...la verdadera esencia se halla en esas cosas imperceptibles que se construyen día a día. 

A mi ayer me hicieron la persona más feliz del mundo mi hermana y Javier. Estaba pasando un día muy duro y sin esperarlo, me alegraron el día, la noche y todos los tiempos que haya. Fui feliz, lo disfruté y lo agradecí enormemente a los dos. Y como dice mi madre hasta en los peores días, siempre pasan cosas buenas. Aquí os dejo una foto que tomé durante esos momentos de felicidad.



Y además, hoy no solo quiero darle valor a los pequeños detalles que tienen los que nos quieren con nosotros sino también a los pequeños detalles de la vida. En realidad, no somos conscientes de que la lotería nos toca a diario, en cada segundo y en cada pequeño detalle. Detalles como poder levantarnos cada día y tener al lado a las personas que queremos. Lo verdaderamente importante y lo que nos mantiene vivos es lo cotidiano; pero de esto sólo nos damos cuenta cuando algo nos falta o nos falla. Y aunque es triste que nos demos cuenta así, es realmente cuando aprendes a valorar las pequeñas cosas de la vida.

Con todo esto me gustaría animaros a que seáis felices y también hagáis muy felices a los que queréis con esos pequeños detalles de la vida. 

RUFLEX CONSEJO: A disfrutar de los pequeños detalles.

No hay comentarios:

Publicar un comentario