Rúflex, no te rindas!



Hay días como el arco iris, de todos los colores. Hay días apagados o llenos de color. Y cuando tocan días grises, parece que tenemos ganas de hacernos una bolita y taparnos con el edredón.



Para mi los días son grises cuando Rúflex está dolorida o me da problemas del tipo fiebre, malestar, náuseas, apenas tengo fuerzas y me siento muy cansada. Se que es debido a Rúflex. Y en esos momentos, lo único que puedo hacer es esperar pacientemente a que pase con reposo, tranquilidad, paciencia y el tratamiento para ello. La espera se hace larga y dura. El ánimo baja, sobre todo, si te has levantado bien, estás de risas mañaneras con tu hermana y de repente, Rúflex os sorprende dando una puñalada que para el mundo en ese momento. El mundo lo para pero ella late a toda prisa y genera tal inquietud a mi alrededor que convierte las risas en momentos de silencio.



Y no sólo es lo físico sino que tu mente se desordena cuando recibe golpes de nuevo. Van completamente ligadas. Si uno baja, la otra también pero si algo tengo claro es que en ese duelo quien gana es la mente. Es mucho más poderosa, y si tú te centras en darle ese gran poder, todo se reordena y las oportunidades suceden.

¿Qué es lo difícil de todo esto? Darle a la mente el poder de cambiar tus pensamientos en ese momento gris. Tu mente deja arrastrarse por esas circunstancias y lo fácil es seguir ese camino. Lo difícil es hacer justo lo contrario. Salir de ahí e ir en la otra dirección. Esto nos pasa a todos sea lo que sea que hace nuestro día gris.

¿Qué podemos hacer? Pues yo intento detenerme, pensar en lo que me está pasando y las posibles soluciones que tengo a mi mano en ese momento para cambiar mis pensamientos. Por ejemplo, el día de hoy he intentado pensar en cosas que me han pasado y me han sacado una sonrisa y han sido múltiples cosas que os muestro a continuación:

  -Los cuidados y amor que recibo de todos los míos
  -La visita sorpresa de los padres y la hermana de mi novio recibiendo todos los mimos del mundo
  -Las frases que cada día me manda mi madre para aprender y fortalecerme
  -La llamada mañanera de mi padre
  -Los audios y mensajes de gente que quiero tener a mi alrededor siempre
  -Los videos de Limón
  -Las risas con mi hermana
  -Las magdalenas que me manda mi Titi
  -Los mensajes de mi cardiólogo, que es un ángel
  -Las visitas de Albertico y los mensajes que me deja escritos por el salón
  -Las fotos que me envía mi jefe de cada lugar increíble que visita en sus vacaciones


  -Colorear con la pequeña artista de la familia
  -Las risas con mi niño que nos oyen hasta en el fin del mundo
  -Los audios de Nata y mi cuñado el navarrico
  -Escuchar a Marcos
  -Ver una buena peli


Y esto qué hace? Deshacer esa bolita en la que estabas hecha bajo el edredón.

RÚFLEX CONSEJO:

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